"Himmelhoch jauchzend, zu Tode betrübt" Goethe.
De la más alta euforia a la más profunda aflicción.

miércoles, 3 de agosto de 2011

Ambrosía musical

Bajó al máximo la persiana, cerró la puerta de su habitación y apagó la luz. A tientas volvió a la cama, se colocó los enormes cascos y pulsó el play. El flujo lento de una canción fue apoderándose de la habitación oscura, colándose por cada rincón y envolviendo a José. El fantasma rosa lo arropó, acariciándolo con suaves palabras de una guitarra eléctrica. José cerró los ojos y se dejó llevar. La canción iba tomando forma y, simultáneamente, sus rizos oscuros palpitaron al ritmo marcado por la batería. Cuando la voz hipnótica inició su hechizo, él se encontraba muy lejos de allí.

Remember when you were young…

Apareció en una selva salvaje, rodeado de árboles serpenteantes y flores exóticas de tamaño desorbitado. Miles de diamantes brillaban, destacando entre el verde fantasmagórico de la flora sobrenatural. Guiado por la locura de aquellas joyas se puso en marcha, adentrándose en la selva de luz y sonido. Escondidas entre los troncos llenos de musgo se encontraban unas jóvenes desnudas, las hermosas ninfas. De sus cabellos pendían pétalos incandescentes que, inexplicablemente, no prendían en las hojas, ni en el suelo cubierto de hierba, sólo en su corazón acelerado por la droga intangible que gemía en sus venas. Las ninfas tenían las uñas decoradas con pequeños trozos de aquellos diamantes que poblaban toda la selva, y su piel olivácea creaba un bello matiz con sus ojos violetas. José no dudó ni un instante, y se acercó a ellas. Las abrazó, lloró en sus cabellos de pétalo, bebió la ambrosía de sus pechos y se dejó arrullar por sus palabras venenosas.
De repente todo cambió. La selva luminosa se transformó en un sombrío bosque, y las ninfas huyeron, dejando a José tirado en la hierba, con los labios dulces y el corazón dolorido.
Sin necesidad de abrir los ojos se dejó conducir por un instinto nuevo y palpitante, que lo condujo al centro de un claro. La música a su alrededor había cambiado: ya no era lenta, sugerente; sino rápida y amenazante.

Threatened by shadows at night, and exposed in the light.

Al abrir los ojos descubrió el cadáver de un gran lobo gris y, sin saber por qué, le abrió la boca. Las poderosas fauces no opusieron resistencia a sus manos de guitarrista, y se abrieron para mostrarle un pequeño frasco de cristal que dormía sobre la lengua del lobo, esperando. Lo tomó y observó su contenido trasparente, sin dar crédito a sus ojos. Eran lágrimas de lobo, el elixir de la inmortalidad. Cuando se disponía a destapar el frasco, el animal comenzó a desaparecer muy poco a poco, así como los árboles milenarios y el brillante rastro de diamantes que las ninfas habían dejado en su huida. Todo desapareció, incluso el frasco.

You reached for the secret too soon, and you cried for the moon.

José despertó en su habitación, a oscuras, con el corazón en la boca y un miedo que guardaba silencio en su retina. La música se había detenido.

1 comentario:

  1. Increíble vuelo lleno de música... me dejaste pensando cuando me tiro a la cama a escuchar alguna canción y me alejo de todo lo mundabo de mi alrededor, me encantó esta entrada, besos

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Empaña las paredes de mi palacio con tu voz, y escribe en el cristal tu nombre :)